- En su discurso de investidura, la candidata a presidenta del Gobierno de Cantabria ha apostado por una rebaja generalizada de impuestos
El primero de los tres pilares del Gobierno de Cantabria de María José Sáenz de Buruaga, la economía, ya tiene su primera medida. La líder popular anunció en su discurso de economía una reforma fiscal “orientada al crecimiento, la inversión y el empleo”, cuyo fin es reducir o eliminar la mayor cantidad de impuestos posibles. “Cantabria no necesita un Gobierno más rico, sino una sociedad más próspera” argumentó.
La reforma incluirá reducir el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, tanto para bienes muebles como inmuebles, con especial énfasis en la compra de la primera vivienda. En cuanto a sucesiones, se extenderá la bonificación del 100% que actualmente existe entre cónyuges y padres e hijos a los hermanos. También se eliminará el Impuesto de Patrimonio y se bajará el tramo autonómico del IRPF a las rentas medias y bajas.
La justificación de la propia Buruaga se ha basado en que Cantabria está entre las comunidades con mayor presión fiscal a particulares y, además, es de las menos competitivas fiscalmente para las empresas. Además, añadió que “nunca hubo un contexto más ventajoso para hacerlo” ya que ahora mismo en Cantabria se registra un “récord de recaudación, con al menos 167 millones extra solo de IVA e IRPF en 2023; de 1.000 millones más de presupuesto que el último Gobierno del Partido Popular, el mayor de la historia de la autonomía, y de nuestra posición en el Sistema de Financiación Autonómica.” Por último, indicó que Cantabria es la comunidad con más financiación por habitante, siendo un 23% por encima de la media en España.
María José también ha tenido tiempo para hablar de la inflación: “el cántabro ha estado pagando IRPF como si ganara 100 cuando, en términos reales, solo ganaba 88 y eso ha sido profundamente injusto para una región de clases medias como es la nuestra.”
Por último, Buruaga ha anunciado una serie de deducciones para fines específicos como favorecer la natalidad y la conciliación, ayudar a los jóvenes menores de 36 años o a las personas con discapacidad y ayudar a las zonas despobladas de nuestro medio rural.
Esta medida será, según la propia candidata, la primera que tomará su ejecutivo, por lo que en las próximas semanas deberían comenzar los avances para sacar adelante una mayoría parlamentaria que permita aprobar la reforma.